Una nueva película de animación llega de la mano de Disney-Pixar para recrear en esta oportunidad el Día de los Muertos que se celebra en México cada año.

“Coco”, que no es el nombre del protagonista, sino de su bisabuela, se centra en el pequeño Miguel (Anthony González), un apasionado de la música que debe ocultar su entusiasmo ante su familia. Todo por culpa del tatarabuelo, quien se fue con su guitarra a triunfar por el mundo y jamás regresó. Esto provocó que su esposa Imelda prohibiera a su hija Coco y a sus descendientes, todo lo relacionado con la música, y comenzara a dedicarse al negocio del calzado.

Pero Miguel, admirador del gran músico Ernesto de la Cruz (Benjamin Bratt) desoye las órdenes de su familia y pretende inscribirse en un concurso de talentos musicales la fecha en la que se venera a los muertos y se los recuerda para que por ese día, “vuelvan” a visitar a sus seres queridos. Accidentalmente Miguel llega a la Tierra de los Muertos y allí intentará encontrarse con su ídolo para que pueda hacerlo regresar al mundo de los vivos. Pero no le será fácil a Miguel lograr su cometido. En el otro mundo se encontrará con parte de su familia, influenciada por Imelda y su odio a la música, y con Héctor (Gael García Bernal), quien tratará de ayudar al niño en su regreso a casa, no sin antes pedirle un gran favor.

No es nuevo que a Disney siempre se le ha criticado el hecho de incluir a la muerte en sus películas. Y esta, no es la excepción. Pero aquí, por más que se piense cómo puede afectar a los chicos el tema de la muerte tan explícito, se ha trabajado de una manera en que los niños verán ese mundo como uno más de fantasía. Es tan fuerte la historia de Miguel y la búsqueda de sus antepasados que deja de lado la muerte tal como la sufre cualquier mortal.

“Coco” es también una película sobre la cultura de un pueblo hacia sus familiares fallecidos y el empeño en mantenerla ante la indiferencia de los más jóvenes. La excusa para contarlo es la historia de Miguel y sus antepasados, con la música como hilo conductor.

La película tiene también su cuota de humor y dejará a los más grandes un momento de emoción que seguramente finalizará con alguna lágrima.

MERCEDES BENÍTEZ - mbenitez@labutaca.com.ar | @Mercyty