Alocado y original film que presenta a una particular tienda de indumentaria en rebajas y a un vestido con una maldición para todo aquel que lo use, que bañará a la platea en sangre pura.
La siempre solvente Marianne Jean Baptiste es la madre de un adolescente artista, que metió a su novia bastante mayor que él en el departamento en el que viven. Recientemente separada, esta madre busca pareja a través de los anuncios del diario.
Corren los años 70 y decide comprar un vestido rojo para sus citas en una tienda especial atendida por mujeres vestidas como a principios del Siglo XX y comandadas por un anciano con estilo Nosferatu.
El terror y lo delirante –sobre todo en la tienda-, se suman al humor ridículo y absurdo –particularmente con los jefes bancarios-, tan difícil de hacer, pero con una naturalidad que sorprende a medida que avanza la trama.
Claramente separada en dos partes, quizás un poco extensa pero nunca aburrida, esta demencial película no es apta para estómagos sensibles.
El realizador arremete con las estéticas de las décadas de los 60 y 70, homenajeando a los comerciales de televisión, el giallo de Darío Argento, con un toque de los primeros trabajos de David Cronenberg y una pizca de erotismo bizarro cuasi explícito.
“In Fabric” es un delirio maravilloso que no dejará indistintos a los espectadores.
Juan Pablo Rousseaux | @jeanpaulcine
País: Reino Unido
Dirección: Peter Strickland
Elenco: Marianne Jean Baptiste, Gwendoline Christie
Duración: 118 minutos