Documental acerca de Bernardo Arias, de 90 años, director de cine, realizador de tres largometrajes y quien trabajó como asistente de dirección en los estudios Lumiton, bajo la dirección de varios próceres de la cinematografía Argentina.

Arias decide emprender el comienzo de un cuarto largometraje que tiene que ver con el valor del arte para los jóvenes. Apoyado por su esposa, amigos y el realizador Marcelo Goyeneche, quien le propuso asistirlo mientras filma este documental, viajan a Rosario para convocar al maestro Antonio Pujía.

Retratándolo junto a sus esculturas, los encuentros entre Pujía y Arias, vuelcan sabrosas anécdotas y tocan temas existencialistas como que es el arte, la vejez, la juventud y lo que uno deja como legado.