En continuidad con la explotación de sagas, nuevamente tenemos a la que podría llamarse ‘novia de Chucky’: la demoníaca muñeca Annabelle.

Luego de que Lorraine y Ed Warren capturan y encierran a Anabelle en el cuarto de objetos maléficos que poseen en su residencia, deciden ir a dar una conferencia a otra ciudad y dejan a su pequeña hija al cuidado de una responsable niñera.

Una amiga de la cuidadora insistirá para ir esa noche a la casa de los Warren y prometerá comportarse bien, pero apenas le dan un ápice de confianza, encuentra las llaves del cuarto prohibido al cual entra y saca a Annabelle de su prisión de cristal bautizado.

Lo que sucederá después es el centro de este film con mucho suspenso, algunos sustos y poco terror debido a un guión que peca por ser muy lavado. La liviandad de los eventos y el vuelo rasante con la velocidad con la que parece haber sido escrito, es lo que le juega en contra. La aparición de un ´hombre lobo´ digital, muy vulgar y burdo, tiran por la borda todo lo hecho hasta ese momento en la película.

Único responsable de este pseudo fracaso en la saga es Gary Dauberman, creador del personaje de Annabelle, guionista y director de la presente además de co-escritor de la historia junto a James Wan.

Punto a favor el comienzo con la presencia de Vera Farmiga y Patrick Wilson, y el esfuerzo actoral por poner caras de circunstancia de la pequeña Mckenna Grace. El resto, previsible.

“ANNABELLE 3. VIENE A CASA”

Dirección: Gary Dauberman.

Protagonistas: Vera Farmiga, Patrick Wilson, Mckenna Grace.

Duración: 106 minutos

JUAN PABLO ROUSSEAUX - jpr@labutaca.com.ar | @jeanpaulcine